02 julio, 2005

Ordenan investigar trasplantes


Anuncian que una comisión revisará que procedimientos estén apegados a derecho,

Norma Gómez/Silvia Macías
EL DIARIO Chihuahua— A fin de darle transparencia al Programa Estatal de Trasplantes de órganos, el Gobierno del Estado decidió reestructurar el Consejo Estatal y ordenó el seguimiento e investigación de los procedimientos aplicados en Chihuahua, “hasta las últimas consecuencias”.

Así lo informó ayer el secretario de Fomento Social, Carlos Carrera Robles, luego de que El Diario publicó dos casos en los que era puesta en duda la autorización de los familiares de dos difuntos a los que les fueron extraídos órganos para ser transplantados.

El funcionario agregó que la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios realizará una revisión minuciosa de los casos de trasplantes que se han realizado, para verificar que los procedimientos estén apegados a derecho. En caso contrario, dijo, se promoverán los procedimientos de responsabilidad conducentes.

Previamente el gobernador José Reyes Baeza Terrazas ordenó ayer mismo a Carrera Robles convocar de manera urgente al Comité de Trasplantes, a fin de que se informe a la población sobre las acciones que al momento se han realizado en la entidad en esa materia.

Al respecto, Carrera Robles añadió que para dar certeza de que se respetarán y resguardarán los derechos de las personas en condición vulnerable, se integrará al Consejo Estatal de Trasplantes un representante de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), uno de la Coordinación Estatal de la Tarahumara, otro de la Oficina de Atención a Menonitas y uno más del Consejo de Desarrollo Social.

Esto en caso de que se trate de un indígena y de un representante de la Oficina de Menonitas cuando sea un miembro de esa comunidad.

Además, cuando el consejo solicite la donación de órganos a los familiares del donante, deberá estar presente un representante de la Comisión de Derechos Humanos.

La intención es evitar que se haga presión sobre los familiares del donante o se condicione la donación de órganos.

El secretario de Fomento Social aclaró que no se debe cobrar por los órganos que se transplantan, porque se trata de un acto altruista.

Explicó que lo que sí representan costos son la hospitalización y el tratamiento clínico, que varía de acuerdo al hospital donde se practica, pero en ningún caso debe sobrepasar los 130 mil pesos.

Incluso en los hospitales públicos del estado, como el Central, el servicio puede ser gratuito, previo estudio socioeconómico.

Informó que hay en el estado de Chihuahua, ocho hospitales autorizados para transplantar y que la Clínica del Parque es la única donde se realizan trasplantes de corazón, ya que ahí cuentan con el equipo sofisticado para realizar las operaciones.

Con las acciones que se implementarán para el Consejo Estatal de Trasplantes de Órganos se verificará y vigilarán los procedimientos y protocolos establecidos para este tipo de operaciones.

También se verificarán los cobros que se realizan por las operaciones para los trasplantes, toda vez que algunos sobrepasan los 350 mil pesos.

El Consejo Estatal de Trasplantes está integrado por representantes de la Secretaría de Fomento Social, Secretaría de Educación y Cultura, Procuraduría General de Justicia del Estado, Instituto Chihuahuense de Salud, Servicios Educativos en el Estado de Chihuahua, Quinta Zona Militar, el delegado del IMSS, el delegado del ISSSTE así como directores de hospitales e instituciones médicas y académicas del sector público, privado y social.

Crean consejo

Luego de dos denuncias presentadas ante la Coordinadora Estatal de la Tarahumara, en las que se advirtió un posible tráfico de órganos, el gobernador José Reyes Baeza giró órdenes a la Secretaría de Fomento Social para la creación del Centro Estatal de Trasplantes.

En este local se concentrará toda la información relativa a los trasplantes y será la sede del Consejo.

También se realizarán los trámites correspondientes para este procedimiento de donación, cuyo propósito es altruista.

En una improvisada rueda de prensa celebrada al término de la reunión donde se dio a conocer el Programa Integral de Seguridad Ciudadana, el secretario de Fomento Social, explicó que el coordinador estatal de trasplantes, Carlos Gastón Ramírez, tiene documentados 39 casos de trasplantes de riñón, y uno de corazón realizados este año en el estado de Chihuahua.

Dijo que de los órganos donados, históricamente sólo tres casos han procedido de personas de la etnia tarahumara, de los cuales, dos se efectuaron en lo que va del 2005.

Agregó que para realizar los trasplantes existen una serie de requisitos, protocolos y procedimientos que deben cumplirse de manera escrupulosa.

Entre los más importantes está la emisión de la certificación de muerte cerebral que deben hacer dos médicos expertos en neurología o neurocirugía, y que no pertenezcan al equipo de doctores tratantes.
Actualizado: 1:36:13 AM hora de Cd. Juárez
2 de Julio del 2005

01 julio, 2005

En algunos pueblos de Nepal 15% de la población ha vendido sus órganos Riñones a 600 euros


Sergio Rodríguez Sánchez
(CCS).- El transplante de órganos es una operación cada vez más común y sencilla. Los riesgos son ya muy reducidos y salva las vidas de muchas personas. Pero encontrar un donante nunca es sencillo, las listas de espera son largas y el tiempo de los pacientes limitado. En tales circunstancias, no es extraño que florezca un mercado negro de tráfico de órganos al que pueden recurrir quienes pueden pagar grandes cantidades de dinero.
Un mercado suculento que las mafias se han apresurado a controlar. La demanda de órganos en los países más desarrollados es cada vez mayor que en el resto, y en la mayoría de ellos el sistema de donaciones está regulado y prohibida tanto la venta como la especulación. Sin embargo, la mayor parte de los compradores provienen de estos países, y recurren a mafias que se abastecen en las zonas más pobres del mundo, como India, China, Mozambique o Sudamérica.

En muchas ocasiones no hace falta recurrir a la extorsión, al asesinato o a las cárceles. Hay zonas en las que vender un riñón es la única forma de conseguir el dinero necesario para sobrevivir. Por ejemplo, en el valle del Hokse, Nepal, dicha práctica se ha convertido en algo tan común que asusta. En algunos pueblos el 15% de la población ha vendido uno de sus riñones. El método es sencillo: se acuerda un precio, se cruza la frontera con India, camino de algún hospital en el que alguien lo suficientemente rico espera un transplante y se lleva a cabo la operación. Pero el regreso no es tan fácil, puesto que una vez completada la venta lo que menos importa es la salud del vendedor, que es "empaquetado" lo antes posible de vuelta a Nepal, sin las atenciones necesarias, para no levantar sospechas. Todo por 50.000 rupias (unos 600 euros). El precio de venta al público se multiplica debido a los intermediarios.

Cantidades insignificantes que, lejos de favorecer al desarrollo de zonas tan pobres, contribuyen a sumirlas más aún en la pobreza. Mientras, las fuerzas de seguridad de los países en los que, como Nepal, el tráfico de órganos es habitual, no hacen nada por remediar la situación. En unos casos tienen otras preocupaciones; en otros el soborno está a la orden del día. Lo mismo ocurre con los gobiernos.

Desde el mundo desarrollado se critican todas estas prácticas, las organizaciones médicas condenan el tráfico de órganos, pero a la hora de la verdad no hay medidas eficaces para erradicarlo. En muchas ocasiones se ocultan estas prácticas y se niega su existencia, pero lo cierto es que no es difícil hacerse con un catálogo de precios ni contactar con alguien que puede conseguir un órgano rápido y sin preguntas. Lo difícil es pagar lo que se pide.

Es necesario actuar para que esta práctica no se extienda. No se puede permitir que se comercie con seres humanos ni con sus órganos. Mantener un control exhaustivo sobre los transplantes de órganos y establecer fuertes sanciones parece una buena medida para comenzar a atajar el problema, que no es de los países empobrecidos, sino de los del Primer Mundo, pues es en ellos donde se crea la necesidad.

El desarrollo de la medicina permite grandes mejoras. Una de ellas es la posibilidad de transplantar un órgano maltrecho. Pero dicho órgano no se puede conseguir de cualquier manera, sino a través de una donación voluntaria, sin recibir nada a cambio. El abastecimiento a través de las mafias, en países del Sur, no sólo es injusto e ilegal, sino también inmoral, pues no se puede poner precio a la vida.
Actualizado el 2005-07-01
A horas: 11:32:22